miércoles, 25 de abril de 2007




ALAN ERWIN ALDANA GONZÀLEZ es originario de Pantepec, Puebla, radica en Tabasco desde hace treinta años. Nace el 20 de Noviembre de 1958.

Ha realizado estudios de licenciatura en Contaduría Publica por la UJAT en Tabasco, Pintura e Historia del Arte en la Casa de la Cultura de la UJAT, Historia del Arte en la Casa de Artes José Goroztiza; ha tomado clases con los maestros Fèrido Castillo y Fontanelly Vázquez A.

Su participación en Exposiciones Individuales iniciaron en 1981 en la casa de la cultura de la UJAT, de 1984 a 1990 exposición itinerante por los municipios de Tabasco, en el Colegio de Artes Tabasco en 1988 al fundarse esta galería, además de 12 exposiciones en los estados de Veracruz, Campeche, Puebla, Querétaro así como también en el D. F.

De manera colectiva, ha participado con la Exposición Trópico en el Museo de la Ciudad de México en 1988; la exposición “Encuentro con el Trópico” en el instituto veracruzano de cultura en 1988; y en 80 exposiciones más en las galerías de Villahermosa y municipios de Tabasco, Campeche, Yucatán, Quintana Roo, Oaxaca, Querétaro, Chiapas, Puebla, Morelos, Veracruz y D. F.

Es miembro fundador del Colegio de Artes Tabasco, A. C.; miembro fundador del Ho-kin Artistas plásticos del Sureste en Tabasco. Exmiembro de las asociaciones ARTAC y SOMART, de la Cd. De México: extesorero, exsecretario y expresidente interino del Colegio de Artes Tabasco, A. C.


UN ALA CONSABIDA

El paisaje se acerca como un remanso con la ilusión de internarse en los caminos líquidos. Germina en su espacio los libres encantos en aguas pantanosas. Representación emanada de su entorno. Pesca al pescador de pupilas tropicales con el recuerdo del viaje de las garzas entre las venas, comparte una nueva forma de conceptuar su idea. Se afianza a mostrar su tierra, su esencia. Su oficio encuentra sin limites luces de estricta pulcritud. Los animales hilvanan su horizonte encendido levantando al cielo sus trazos lentos Alan Erwin Aldana. Entiende que la raíz del color es un ala consabida cuando tatúa sus pasos silvestres sobre el lienzo.
Dulce María Burgos

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